Aunque no hay un consenso claro en la comunidad médica sobre la influencia de determinados alimentos en el desarrollo de una ginecomastia, las investigaciones realizadas apuntan a que algunos pescados, la carne de pollo y, sobre todo, las carnes rojas (vaca, buey, ternera, etc), los fritos y las grasas saturadas pueden propiciarla por las hormonas como la progesterona o los estrógenos que pudieran contener en su interior.
Por contra, alimentos como el salmón, el aceite de oliva, frutas, verduras y, en definitiva, todo lo relacionado con la dieta mediterránea dificultarían un desarrollo de la ginecomastia.
Lo qué sí influye de forma directa es el consumo de alcohol, anabolizantes y marihuana.
Adicionalmente, algunos medicamentos pueden provocarla como efecto secundario, como el dietilestilbestrol, los contraceptivos orales, la digital, el alopurinol, cosméticos con contenido estrogénico, gonadotropinas, el clomifeno, antiácidos y antidepresivos en exceso, etc.
Investigaciones recientes apuntan a que los ftalatos presentes en algunos alimentos también podrían contribuir al desarrollo de una ginecomastia.
Dra. Prada